Es el momento de dar buena cuenta de otro de los Titanes Guardianes que nos esperan en Sonic Frontiers: Wyvern, el que antaño se encargara de custodiar la Isla de Ares es a quien debemos enfrentarnos, primero como el Sonic de toda la vida tratando de alcanzar la Esmeralda del Caos que tiene en su poder, y luego como Súper Sonic para eliminarlo.
En esta entrada del juego de Sega, os daremos las claves para que no os suponga un problema el haceros con la joya que os permite convertiros en Súper, y luego la forma de tratar de atacarlo antes de que os quedéis sin anillos y este jefe os venza por tiempo.
Combate contra Wyvern en Sonic Frontiers

Wyvern es el segundo de los Titanes Guardianes que custodian las islas de los Ancestros, en este caso concreto la Isla de Ares. A diferencia de Giganto, es uno mucho más móvil que el que se ocupaba de custodiar la isla de Kronos.
Puesto que sin transformarnos en Súper Sonic no podemos nada contra estos monstruos metálicos, primero debemos conseguir la séptima Esmeralda del Caos que está en su cabeza. Al igual que antes de empezar el anterior combate contra el jefe final, aseguraos que vais cargados a tope de anillos.
Primera Fase
Inicialmente parece que no existe una forma de encaramarnos a Wyvern como hicimos con Gigantos en el primer combate. Lo que significa que tendremos que caer sobre el cuando vuele bajo, pero nunca lo hace a nivel del suelo. Afortunadamente hay una torre de los Ancestros no muy lejos lo bastante alta como para intentar atraparlo cuando pase.

Cuando veamos que Wyvern se acerca lo suficiente a la parte superior de la torre y pase por delante de la plataforma, tenemos que saltar para intentar cogerlo. Obviamente no se va a dejar, y en este punto tratará de huir de nosotros pero deja una estela que podemos aprovechar para ir tras él como cuando nos enfrentamos a otros sub jefes del juego como Squid.

Sin embargo, esta se corta en algunas secciones, y lo que debemos hacer es usar nuestro ataque teledirigido contra unos generadores que deja Wyvern, para intentar frenarnos o dañarnos, y alcanzar el siguiente segmento. A fuerza de seguirlo, y de esquivar sus ataques, conseguiremos alcanzar su cabeza para coger la esmeralda.
Segunda Fase

Si ya huía de nosotros sin estar transformados, normal que ahora lo haga más rápido, con la particularidad de que nos lanzara misiles que, aunque no nos hagan daño, si que nos frenarán y le permitirán alejarse. Lo ideal es que tratéis de esquivarlos pero si véis que estáis perdiendo mucho tiempo en alcanzarlo tratad de recuperar algunos anillos mientras lo perseguís.

En cuanto os pongáis a su lado intentará golpearos para enviaros más lejos aún que si os impactara con uno de sus misiles. Basta con que os cubráis con los botones LB/L1 + RB/L1 para detener su ataque y exponerlo a un contraataque. Utilizad vuestros mejores movimientos para quitarle cuanta vida podáis. Poco después tratará de lanzaros un segundo zarpazo, que si bloqueáis os permitirá realizar un ataque especial siguiendo las indicaciones que aparecen en pantalla para lanzarlo contra una montaña.

Tercera Fase

La última fase no es muy distinta de la anterior. Como mucho, Wyvern se pone a "presumir" lanzando unos aros de energía pero que salvo que os vayáis expresamente contra ellos al volver a perseguirle no os alcanzarán. Eso sí, los misiles ahora son más numerosos y rápidos así que tendréis que ser más ágiles esquivándolos. Si volvéis a alcanzarlo y repetimos la operación de bloquear sus ataques y contraatacar, en un momento dado os lanzará una "marea" de misiles.

Es una parte del combate que se resuelve por algunos eventos quick time. Después de este primero, tendréis que bloquear un ataque más para volver a lanzarlo contra una de las montañas. En este punto, la paciencia de Wyvern será tan baja como su vida. Primero intentará lanzarse contra vosotros desde gran altura. Machadando el boton X o Cuadrado lo frenaréis, pero acto seguido os lanzará más misiles. Esquivadlos con otro quick time, y ahora tenéis que hacer que se los trague, literalmente.

Machacando otra vez el botón indicado conseguiremos que abra sus fauces justo a tiempo de ver como los misiles pasan por alrededor nuestro y acaban volviendo a quien los lanzó; como dice el dicho, las maldiciones siempre recaen sobre quien las pronuncia. El caso es que así es como se derrota al segundo Titan Guardían del juego.

Si queréis conocer a fondo el juego o decidiros por él, sólo tenéis que ya han confirmado sus creadores.
Ver 0 comentarios