Se trata de unos de los speedruns más impresionantes de este tipo de modo de juego.
Hay un jugador que ha logrado terminar Divinity: Original Sin II en algo más de media hora. Una marca impresionante si tenemos en cuenta la naturaleza de este RPG y que hace merecedor a este , Onin, merecedor de respeto.
Onin saca provecho de bastantes exploits del juego que hacen posible esta asombrosa marca de 37 minutos y 48 segundos, y de ventajas de propias de su personaje, Fane como Play Dead o teletrasportándose con Tactical Retreat para conseguir moverse por el escenario recortando los recorridos todo lo posible. Además de estas tácticas, evidentemente, este jugador ha jugado mucho, muchísimo.
No te pierdas otros speedruns vertiginosos como éste en el que se consigue superar Portal sin mover la cámara durante todo el juego o Dark Souls 3 sin recibir un solo daño.