El portal Digital Foundry ha estado trabajando con la consola de nueva generación de Microsoft y su rendimiento.
Varios afortunados medios han estado testeando durante una semana Xbox Series S.
Los juegos retrocompatibles cargan más rápido y mejoran sustancialmente su tasa de refresco
Entre sus funciones más destacadas se encuentra la retrocompatibilidad. Ya habíamos visto que juegos como Sekiro mejorarán de forma orgánica su rendimiento llegando a incrementar su tasa de refresco simplemente arrancando el mismo juego. Ahora, Digital Foundry, especialistas en los aspectos más técnicos del mundo del ocio digital, han publicado un interesante vídeo en el que nos compara el rendimiento de los juegos de Xbox One X en Xbox Series X.
El vídeo, que podéis ver sobre estas líneas, nos muestra juegos como Final Fantasy XV, Hitman o Tomb Raider, originarios de Xbox One X, siendo jugados en Xbox Series X, donde los mismos títulos mejoran sus capacidades hasta alcanzar en la mayoría de casos los 60 frames por segundo, quedándose en 30 fps en su versión original tal y como podemos ver en la comparativa. Un trabajo del hardware de la consola de nueva generación de la empresa de Redmond, que mejora el rendimiento de los juegos gracias a su potencia interna.
Un aspecto que demuestra que ya no es solo el hecho de la retrocompatibilidad, que ya es una baza para muchos s, sino que también los juegos reciben mejoras técnicas y de rendimiento que hacen que en algunos casos la experiencia pueda llegar a mejorar o cambiar por completo. Hoy también hemos sabido que los la consola requiere 200 GB para el sistema operativo.