El legendario RPG de CD Projekt separa ahora las expansiones Hearts of Stone y Blood and Wine.
Cuando quedamos impresionados: resultaba cuanto menos llamativo ver cómo un juego tan grande funcionaba en condiciones aceptables en un hardware portátil, pero además fue capaz de llevar todos los contenidos del RPG a un único cartucho. Fue una noticia estupenda para los entusiastas del formato físico, pero para quienes apuestan por el digital, CD Projekt ha implementado una nueva versión del juego en eShop: una que va por partes.
Desde ahora, quienes deseen hacerse con The Witcher 3 en eShop podrán encontrar tanto la versión de siempre, titulada Complete Edition, como también el juego base y sus descargables por separado. Sumando el precio de cada fragmento encontrarás que en realidad pagamos la misma cantidad de dinero por el mismo contenido, pero ahora los s tendrán más flexibilidad a la hora de comprar y descargar el juego.
Si ya lo tenías en eShop, podrás redescargarlo por separado
Es decir, que podrías hacerte con el juego base por 19,99 euros y si te engancha, añadir Hearts of Stone y Blood and Wine cuando te parezca conveniente. Por supuesto, el paquete de 16 DLC adicionales y los descargables de lenguas adicionales están disponibles de forma gratuita en la tienda, como en el resto de plataformas.
Aquí va la guinda del pastel: quienes hubiesen comprado la edición completa en eShop anteriormente recibirán un 100% de descuento en cada parte, lo que significa que si necesitas aliviar espacio, será posible desinstalar el juego y descargar después solo las partes que vayas a utilizar. Además, desde el blog oficial matizan que el guardado cruzado seguirá estando disponible para quienes tengan los mismos contenidos comprados en PC y Switch.
Éxitos y dilemas comerciales de CD Projekt
The Witcher 3 no solo lleva triunfando en las críticas de la prensa especializada y los aficionados desde 2015, sino que también se ha mantenido como un juego excepcionalmente rentable: devoluciones masivas que impidieron registros mayores. Ahora, el estudio polaco lucha por limpiar su imagen y recuperar la confianza de los fans.