"Algo impensable en los tiempos actuales", declara un antiguo programador de Rare.
Uno de los considerados como mejores juegos de Nintendo 64, el clásico GoldEneye 64, se hizo grande, entre otras cosas, gracias al adictivo multijugador que incluía, un modo que fue introducido a última hora en el videojuego, y sin que los managers de Rare o Nintendo tuvieran constancia de ello hasta que se presentó la versión final.
El director Martin Hollis, ha tenido una aparición en la GDC de Europa para hablar de una serie de curiosidades del videojuego, sobre todo de una que vivió su compañero Steve Ellis, quien itió que tanto el mencionado multijugador como "otras características" fueron incluidas en el juego sin el consentimiento de la gestión de Nintendo y Rare, algo que sería "impensable imaginar en los tiempos actuales".