La memory card de la añorada consola de Sega disponía de pantalla propia.
Pocas consolas tienen el honor de ser tan añoradas como Dreamcast, el último hardware que lanzó Sega al mercado en 1999. Una de sus principales características estaba en su tarjeta de memoria, la VMU, con pantalla propia y capaz de ofrecer datos y animaciones del juego que se jugaba desde el mando de la consola. Un de YouTube ha subido a la red su último experimento: una versión de Flappy Bird jugable en la VMU de Dreamcast.
Flappy Bird se convirtió en un fugaz pero intenso fenómeno viral en todo el mundo hace justo dos años. Las aventuras del pájaro más torpe del mercado móvil capturó a millones y millones de s en teléfonos móviles y tabletas, generándose una locura colectiva que llevó a su desarrollador, Don Nguyen, a verse superado por la fama y retirar el juego para evitar mayores problemas en su tranquila vida.