Como no hay modos individuales, el juego dejará de ser accesible a partir de ese punto.
Está claro que Behaviour Interactive tiene mano con los multijugadores asimétricos, pero más allá de renacer como Deathgarden Bloodharvest con nuevos contenidos y políticas amigables, sin éxito.
Como resultado, sus responsables abrieron el juego a todo el que desease probarlo, advirtiendo que los servidores no durarían mucho. Pues bien, hoy sabemos hasta cuándo permanecerán activos: "vamos a anunciar el cierre del juego" cometa la cuenta oficial de Twitter. "Los servidores se apagarán el 12 de agosto de 2020. Deathgarden no se podrá jugar a partir de ese punto".
Puede que nunca lograse convertirse en un juego popular, pero sus jugadores no han tardado en acudir a la publicación con diferentes sugerencias para mantener viva la llama durante un tiempo: ¿dejar el código abierto en manos de la comunidad? ¿Trasladar las 'skins' de sus cazadores a DBD? Son ideas que no se han contestado de manera oficial, pero habrá que vigilar de cerca.
Deathgarden planteaba una suerte de deporte sangriento donde los jugadores interpretaban supervivientes ágiles y sigilosos, o un cazador lento y acorazado. Las partidas transcurrían en un jardín que daba nombre al juego y que se configuraba de forma semialeatoria. Tras anunciar el ocaso del juego, Behaviour Interactive devolvió el dinero a los compradores más recientes y permitió que cualquiera entrase a jugar sin coste adicional.
Last November, we said that we would keep the Deathgarden servers up for an undetermined period of time.
— Deathgarden™: BLOODHARVEST (@DEATHGARDENgame) July 13, 2020
Today we are announcing the sunsetting of the game. The servers will be closing on the 12 of August 2020. Deathgarden will no longer be playable at this point. (1/2)